top of page

Interpretando momentos de crisis


Y en un momento donde varias cosas funestas han pasado en mi vida y entorno, me detengo y le trato de encontrar un sentido a lo que está sucediendo.

Le llamaré al complejo “el problema”.


Y es que, a pesar de que soy muy aterrizada en algunas cosas y en ocasiones pesimista, me topo con peores reacciones y oscuras interpretaciones  como que cualquier problema es tomado como un castigo y eso me parece muy católico, no coincido, hay cosas que vivimos como problemas por una falta de coherencia o porque necesitamos ver algo que estaba escondido, como comprender cómo se sienten algunas emociones, o personas, mirar la pieza que hace falta, buscar la pieza, tomar el camino correcto en la siguiente ocasión, no para sentir culpa, o vanagloriarnos en el castigo imputado por nuestro mal comportamiento sino para tomar consciencia.


Otros me han dicho que es Karma y sí, como consecuencia, personal, familiar o incluso de mi comunidad o país, pero no en el sentido de castigo.


Hay chivos expiatorios para todo, ¿qué sabemos nosotros de los contratos hechos antes de nacer? Arrogancia es creer que se tiene claridad absoluta. NADIE tiene todas las respuestas, ¿Dónde tiene cabida entonces el MISTERIO?


A veces es sólo comprender que hay momentos buenos y momentos malos, que todo es cíclico y no vamos a forzar al campo a dar cuando no le corresponde, eso es “sobre explotación”. Y ¿cómo avanzar si sigues sólo tu voluntad sin entendimiento?


Empezó todo con querer hacer responsables a otros en contra de su voluntad (aunque era su responsabilidad), pero quién soy yo para corregir… quise orillar a otros a ocupar su lugar y ahí empezaron los problemas.


“Cada quien a lo suyo.” Y si el otro no hace, tú haz lo tuyo y un poco más para que salga y no reproches.

Algo más que estoy aprendiendo en esta lección es que reitero que me cagan los consejos no solicitados, así como el “hubieras…”


Y se refuerza lo que he venido aprendiendo desde hace una semanita: “COMUNIDAD”.


Buen momento para reencontrarte con viejos amigos, hermanos y colaboradores en tiempos de crisis.

Cuando parece que las puertas se cierran, afuera habrá una mano amiga y adentro la llama reveladora de Hécate.

¡Gracias por estar!

23 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Commentaires


bottom of page