OPINIONES DE UNA BRUJA
Y si vivimos con conciencia y magia podemos apresurar el proceso evolutivo en lugar de vivir el karma de manera lenta y trágica.
La personalidad es un instrumento, así como nuestros dones. Nos permiten ver lo que hay más allá para conectarnos con nuestra divinidad.
Sin embargo, nos han hecho creer que nuestros dones son malos, que son “pecado”, cosa del diablo, son objeto de burlas y desacreditación. Nos han querido quitar nuestra armadura y herramientas de Asención para vivir la vida plenamente.
Aprendemos sólo a través de las experiencias. Lo que aprendemos nos da la teoría, es sólo un apoyo, pero de nada sirve si no lo vivimos aterrizando ese conocimiento al corazón.
La vida es para vivirse, fluir con ella, vivir intensamente.
Debemos confiar en la vida, vivir cada experiencia al máximo, no negar quiénes somos y nuestros dones. De nada sirve evitar, negar.
Solamente viviendo al máximo cada experiencia, obtenemos sabiduría y visión interior.
Una cualidad de la bruja es reconocerse, reconocer otros planos, reconocer sus dones y su naturaleza verdadera, no la caparazón primitiva, sino su naturaleza mágica y divina.
Nos han hecho creer que nuestra naturaleza mágica es cosa del diablo, es de ignorantes, ¡no se basa en la ciencia! Pero por favor, hay más de 9 métodos de acercarnos a la realidad.
El vivir experiencias psíquicas y místicas puede justamente sustentarse mediante el empirismo analítico y la hermenéutica. Alguien que niega este tipo de experiencias, está negando su verdadera naturaleza.
El miedo no puede detener la exigencia de la experiencia, la divinidad que reside en nosotros podrá sólo aprender a través de ello, debemos superar el temor, tanto a la experiencia desconocida como a la opinión de otros. Nuestro cuerpo, mente y personalidad, repito, son instrumentos que deben ser perfeccionados para acercarnos cada vez más a nuestra verdadera esencia; la Alquimia interior, el Tarot iniciático, la Qabalah mística dentro del ocultismo occidental nos muestran el camino. Nos ahorran muchos errores y tiempo, sin embargo, lo que he observado es que las personas comienzan muy entusiasmadas estudiando Witchcraft o Wicca y quieren estar viviendo experiencias místicas o psíquicas que se vuelven una adicción, lo quieren todo rápido y que sea proporcionado. Se siguen sumergiendo en dramas personales e incomprensión. El camino trazado por nuestros hermanos mayores y del pasado es un gran regalo, de nada sirve tenerlo en apuntes, o videos, sólo saberlo y no experimentarlo. No hay de otra más que experimentarlo, hacer las meditaciones, practicarlo en nuestra vida diaria. Integrar a nuestra vida la Magia. Sólo así la divinidad podrá fluir a través de nosotros y las experiencias místicas se multiplicarán sin forzarlas.
No venimos a ser castigados y aprender, venimos a recordar y experimentar para reconectarnos con nuestra verdadera esencia divina asombrándonos en cada momento.
Un niño aprende rápido cuando está viviendo y se asombra de todo, como él, hay que sumergirnos en el pleno espíritu de cualquier experiencia.
Y si vivimos con conciencia y magia podemos apresurar el proceso evolutivo en lugar de vivir el karma de manera lenta y trágica, ¡para qué sufrir innecesaria y prolongadamente!
Poco a poco al integrar los principios de un verdadero camino espiritual, viviremos desde nuestra personalidad superior en lugar que desde la personalidad inferior.
El primer paso es: alimentar nuestra voluntad para tener ganas de hacerlo, ahí sí requerimos de esfuerzo y disciplina, no hay de otra.
Segundo paso: dejarnos guiar por la voluntad superior, no estar dudando en cada momento si debemos ir o hacer una cosa u otra, debemos confiar en nuestro Yo superior diciendo: “El Yo superior me hará que dé vuelta a la derecha o a la izquierda o tal o cuál cosa de acuerdo a su Voluntad Divina”.
Entrega tu personalidad al Yo Superior y observarás los cambios.
Yo sí creo qué hay un Plan Cósmico, y ¿si nos dejamos guiar en cada momento por su sabiduría?
Cuando no sepas qué hacer permite que el Ser Divino interceda, deja que te guíe y dé la respuesta, tu Yo Superior tomará el control y así verás cómo te comunicas de una manera más constructiva y amable vivirás “milagros”.
Bendecido camino.
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